Plataformas de facturación como Factoo que amparan la actividad de falsos autónomos bajo la apariencia de socios-trabajadores de una cooperativa con el único objetivo eludir el cumplimiento de sus obligaciones con la Seguridad Social han sido ya objeto de intervención por parte de la Inspección de Trabajo.
Lo que se pone de manifiesto es la ineficacia del marco legal actual para dar encaje a situaciones como la particular relación laboral – por su naturaleza y por su intermitencia – de los empleados-colaboradores de las nuevas plataformas digitales o la actividad esporádica o habitual con ingresos irregulares de profesionales sin una adscripción laboral fija.
El Ministerio de Empleo estudia desde hace meses fórmulas para dar cauce legal a estas situaciones y evitar su desplazamiento hacia los ámbitos más grises de la legislación, cuando no directamente a la economía sumergida.
Una de las fórmulas que está estudiando el Gobierno es el establecimiento de una tarifa súper reducida de cotización en el Régimen de Autónomos.
La propuesta busca acabar con la injusta situación que viven miles de profesionales que se dan de alta en el Régimen de Autónomos para iniciar una actividad por cuenta propia y que se ven obligados a pagar todos los meses una cuota de un mínimo de 275 euros (50 euros si se puede beneficiar de la tarifa plana), con independencia de los ingresos que obtenga por su actividad para poder cumplir con la ley.
La aplicación de esta tarifa súper reducida, cuya cuantía podría fijarse entre los 25 o 30 euros mensuales, se limitaría a los autónomos con intención de permanecer en situación de alta durante todo el año, pero que por la naturaleza o la inestabilidad de su actividad no consiguen ingresar en cómputo anual una cuantía superior al Salario Mínimo.
Habrá que ver cómo evoluciona la propuesta del Gobierno y como es acogida por los distintos agentes económicos para que pueda ver la luz una ley que modifique el régimen de autónomos.
Joan Lladó Chimenis
Abogado