Una externalización en una pyme suele ser sinónimo de que está consiguiendo éxito, aunque siempre hay que tener en cuenta muchos factores y seguir una estrategia adecuada. Los pasos son:
- Conocer el mercado: conocer el mercado de destino. Debe saber las necesidades del futuro “target” y qué posibilidades tendrá su producto.
- Tener un plan: la estrategia es importante, toda empresa debe tener una planificación con la rentabilidad del negocio en el país extranjero y las acciones a seguir.
- ¿Cómo entrar en el mercado? A veces la opción más interesante es contar con un socio que conozca el mercado global.
- Sé realista: El objetivo no es sólo la externalización, es también el proceso empresarial.
- Asigna recursos: Es importante conocer los recursos de los que se dispone para desarrollar el plan de internacionalización. El tiempo que se tarda en estabilizarse la empresa normalmente es dos años.
- Vigila con los partners: es necesario ser cuidadoso y determinar si realmente los “partners” de su empresa aportan valor.
- La importancia de los contactos: las ventas en el país de destino suelen estar basadas en estos contactos.
- El responsable comercial: la búsqueda de un responsable en el destino que conozca bien el sector resulta interesante.
- Controlar la burocracia: Conocer a la perfección las particularidades de la legislación contable, fiscal, laboral y mercantil del país de destino.
- Fiscalidad: Sepa la legislación vigente de los países de la matriz y de la filial. Qué conceptos se deben facturar y dónde. Saber los convenios y su aplicación resulta fundamental.