Las microempresas que componen más del 80% de los negocios españoles, ya no disponen del tipo de gravamen reducido por mantenimiento o creación de empleo. Tributaran al 25% cuando la hacían al 20 y en cambio el tipo de gravamen general que afecta a las grandes empresas se reducirá del 30% al 25% en 2016.
La limitación de la deducción de gastos por atenciones a clientes es otra novedad efectiva. Antes no existía este límite y se podía justificar siempre que estuviera acreditado.
Otro aspecto negativo es la aplicación a 10 años el plazo que tiene Hacienda para comprobar las bases, cuotas, deducciones aplicadas y la contabilidad (así como de los documentos contables). Todo lo que molesta a Hacienda, lo cambia vía normativas a su criterio.
También se suprimen deducciones que se echarán de menos en el periodo fiscal de este año y se verá cómo se complica la tributación con nuevas fórmulas como es la novedosa reserva de capitalización en caso de incrementar los fondos propios que afecta a todas las empresas y la reserva de nivelación que afecta a las empresas cuyas cifra de negocio no superen los 10 millones de euros, reduciendo un 10% sobre la base imponible del Impuesto de Sociedades y siendo la última reserva solo diferimiento del impuesto.
Josep Cid Dacosta
Sócio-Economista