La semana pasada, Facebook fue acusado de incumplir con la directiva europea de protección de datos y, responde así, a un informe encargado desde la Comisión para la Protección de la Privacidad de Bélgica.
Ante este informe, Facebook ha respondido reconociendo el fallo pero explicando que fue un error: según la compañía fue a causa de cookies que se enviaron en otras páginas web y a personas que no estaban conectadas en Facebook, ni tenían cuenta en esta red social.
Han rastreado la actividad de internautas en páginas web que contienen “pluggins”, como el botón me gusta de esta red social. Facebook añade que “ha encontrado un fallo que puede haber enviado cookies a algunas personas cuando estas no estaban en Facebook. Se está trabajando para arreglarlo”.
Esta investigación, llevada a cabo por distintas autoridades nacionales, también está formada por la Agencia Española de Protección de datos, quien asegura estar llevando a cabo unas actuaciones previas a una investigación de oficio.