Hay empresas que no prestan atención al IVA derivado de pequeños gastos y se acaba perdiendo, siendo conveniente tomar medidas para que esto no ocurra. Ello pasa por ejemplo, cuando sus empleados no solicitan factura, como es el caso de desplazamientos (taxi y peajes, gastos de restaurante y hoteles), o compra de material de oficina, etc. Si no dispone de una factura, el IVA asociado a estos desembolsos no es deducible, pudiendo eso sí, contabilizarlo como un mayor coste.
Tiene que concienciar a sus empleados para que cuando realicen estas operaciones pidan siempre factura y así podrán deducir el IVA.
Le damos algunas ideas para mejorar en este aspecto:
- Instruya a sus empleados para que coman en el mismo restaurante, de forma que le expidan una factura recapitulativa mensual.
- Si satisface peajes a través de telepago, le harán una factura mensual.
- Trayectos en taxi si los realiza a través de una compañía.
Obtenga facturas de estos gastos.
Josep Cid Dacosta
Socio-Economista