Para evitar tentaciones a la hora de comer puedes preparar tú comida el día anterior, o incluso preparar más cena y guardar una porción para el día siguiente.
A la hora de hacer una dieta, comer en el trabajo puede ser un momento difícil de resolver. Quizá, llevar nuestra propia comida preparada puede parecer incómodo por momentos, y de vez en cuando, preferimos comprar algo en el bar, por lo que terminamos almorzando porquerías, súper calóricas y no nos aportan nada de nutrientes o peor, podemos saltarnos el almuerzo y comer descontroladamente al llegar a casa.
Consejos prácticos:
- Asegúrate beber mucho líquido durante la jornada laboral. Los líquidos ayudan a a sentir saciedad y llegar con menos hambre a la hora de comer. Evita bebidas carbonatadas y zumos artificiales.
- Ten a mano un snack sano para comer cuando tengas hambre fuera del horario de almuerzo. Apuesta por frutas, yogures descremados o un puñado de frutos secos y aléjate de las golosinas.
- A la hora de la cena, cocina siempre un poco más y prepara una porción para el día siguiente.
- Asegúrate siempre de llevar una porción de ensalada. Alíñala cuando vayas a comerla, no antes, para que las verduras no se apelmacen. Una buena idea es reemplazar los aceites por limón o vinagre.
- Prepara alimentos para llevar al trabajo y guárdalos en el congelador. Reserva un fin de semana por mes para cocinar tus comidas. Prepara tartas de verduras y empanadas ligeras y guárdalas a fracciones en el congelador.
- Intenta reducir la cantidad de miga de pan que ingieres. Elige pan con poca miga.
- Para los postres, lo ideal es llevar fruta o gelatina. También puedes llevar postres bajos en calorías.
- A la hora de comer, concéntrate en hablar con tus compañeros en vez de andar contando calorías o tentarte con la comida de los demás.
- Reserva un día por semana para comer eso que tanto te gusta, de esa manera no vivirás con la tentación.
- En tu comida diaria, debes primar los vegetales y hortalizas, las proteínas y en último lugar los carbohidratos. Prepara una ensalada con carne, pollo o atún y reserva los panes para el desayuno y merienda.