Según los últimos datos estadísticos de turismo del Eurostat, el 85% de las estancias turísticas que hacen los ciudadanos europeos las hacen dentro del propio territorio de la UE.
Sin duda una de las últimas noticias que nos permitirá poder tener unas vacaciones más tranquilas, como mínimo, en cuanto a los sustos relativos a la factura del teléfono, es “la anulación” de las tasas del roaming. Esto ha sido un gran adelanto pero también hay otras consideraciones que hay que tener en cuenta.
Y es que la legislación europea regula varios aspectos durante el periodo de vacaciones, como los derechos de los pasajeros, las compras transfronterizas o las ayudas en caso de incidencias en un país extranjero, entre otros:
Bye bye roaming: Desde el pasado 15 de junio llamar, enviar mensajes o consultar internet cuando se viaja dentro de la UE ya no supone un sobre coste. Ahora ya no hay que desactivar la itinerancia de nuestro teléfono móvil siempre y cuando se viaje dentro de territorio europeo o los países del área Económica Europea (los 28 estados miembros junto con Islandia, Liechenstein y Noruega).
Indemnizaciones por retrasos en avión: la legislación europea también protege a los viajeros que se desplazan en avión, en barco, en tren y en autobús y prevé una serie de indemnizaciones en casos de retrasos, pérdida de equipajes o cancelaciones. En el caso del avión se puede reclamar una indemnización si el vuelo se atrasa más de 3 horas, siempre que se viaje dentro de la unión europea, la indemnización puede ir desde los 250 euros hasta los 400. Esta cantidad se podría llegar incrementar hasta los 600 euros si se viaja entre un aeropuerto dentro de la UE y uno de fuera con más de 3.000 kilómetros entre ellos. Las compañías aéreas también están obligadas a indemnizar los pasajeros por cancelaciones de vuelos, por denegación de embarco o por pérdida o daños en el equipaje.
Cobertura médica: en caso de accidente o enfermedad en un país extranjero, la Unión Europea pone a disposición de sus ciudadanos la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE), un documento gratuito que permite a las personas recibir el tratamiento médico necesario durante un aposento temporal en cualquier estado miembro de la UE en iguales condiciones que los residentes de aquel país.
Devoluciones: cualquier compra realizada en otro país de la UE, si se detectan desperfectos o se tiene que cambiar el producto por cualquier motivo cuando ya se han vuelto de las vacaciones, la UE permite cambiar el producto independientemente del país donde se haya comprado. Para facilitar las reclamaciones en estos casos, existe un procedimiento europeo por reclamaciones de pequeñas cantidades, hasta 2.000 euros.
Viajar con mascotas: los ciudadanos de la UE pueden viajar libremente con su perro, gato o hurón si disponen de un pasaporte europeo por animales de compañía, expedido por cualquier veterinario autorizado y donde tienen que constar los datos de la vacunación antirrábica. Si se quiere viajar con otras mascotas como conejos canarios u otros animales hay que consultar la legislación del país de destino que la UE pone a disposición de los ciudadanos.
Protección consular: en caso de encontrarse en un país donde no haya embajada o consultado de los suyo Sido miembro, un ciudadano de la UE puede pedir protección consultar a las autoridades diplomáticas de cualquiera otro Estado de la Unión en iguales condiciones que los nacionales de aquel país.