¿Qué es una reestructuración empresarial?

La reestructuración empresarial es un proceso estratégico que las empresas implementan para modificar su estructura interna con el fin de mejorar su eficiencia operativa, adaptarse al cambio en el entorno o resolver problemas financieros. 

La reestructuración empresarial es un proceso mediante el cual una compañía realiza cambios significativos en su estructura organizativa, estratégica o financiera. Estos cambios pueden ser necesarios para adaptarse a un nuevo entorno de mercado, mejorar la eficiencia, aumentar la rentabilidad o superar una crisis.

Las razones para llevar a cabo una reestructuración empresarial pueden ser variadas, entre las más comunes encontramos:

• Problemas económico – financieros: Pérdidas recurrentes, exceso de deuda, dificultades para obtener financiamiento.
• Cambios en el mercado: Nueva competencia, cambios en las preferencias de los consumidores, nuevas tecnologías.
• Ineficiencias operativas: Procesos internos lentos, duplicación de tareas, estructuras organizativas obsoletas.
• Crecimiento descontrolado: Expansión demasiado rápida que ha llevado a dificultades de gestión.
• Cumplimiento normativo: Necesidad de adaptarse a nuevas regulaciones.

Existen diferentes tipos de reestructuración empresarial, entre los más comunes se encuentran:

• Reestructuración financiera: Se enfoca en modificar la estructura de capital de la empresa, cómo refinanciar deudas, renegociar contratos o emitir nuevos títulos.
• Reestructuración operativa: Implica cambios en los procesos internos de la empresa, como la reorganización de departamentos, la automatización de tareas o la reducción de costos.
• Reestructuración estratégica: Se centra en modificar la estrategia de negocio de la empresa, como el lanzamiento de nuevos productos, la entrada en nuevos mercados o la venta de divisiones no estratégicas.
• Planes de reestructuración de conformidad con la Ley Concursal: fortalece los mecanismos de prevención y solución temprana ante situaciones de insolvencia mediante herramientas diseñadas para permitir a una empresa, que se encuentra en dificultades financieras, renegociar su deuda y reestructurar sus activos y pasivos de manera temprana. La finalidad es evitar una situación de insolvencia irreversible que derive en concurso de acreedores, promoviendo la viabilidad a largo plazo de la compañía y salvaguardando el empleo y el tejido empresarial. La ley permite una gran flexibilidad en la estructura y contenido de estos planes, lo que incluye reestructuración de deudas, modificaciones operativas, financieras y estratégicas, así como posibles acuerdos de refinanciación.

Para llevar a cabo una reestructuración empresarial exitosa, es fundamental seguir los siguientes pasos:

1. Diagnóstico: Identificar los problemas que afectan a la empresa y determinar las causas raíz a partir del análisis de datos y resultados.
2. Planificación: Elaborar un plan detallado de reestructuración, incluyendo objetivos, estrategias, plazos y presupuesto.
3. Comunicación: Comunicar el plan de reestructuración a todos los empleados de manera clara y transparente.
4. Implementación: Ejecutar el plan de reestructuración de manera eficiente y controlada.
5. Seguimiento y evaluación: Monitorear los resultados de la reestructuración y realizar ajustes si es necesario.

Si desde tu empresa tienes dudas sobre cuándo y cómo realizar una reestructuración empresarial, desde Lladó Grup Consultor un equipo de profesionales te asesoramos y acompañamos con la mejor opción para aumentar la competitividad en tu empresa.