¿Por qué cambiar de asesoría?
Existe una amplía variedad de factores que nos hacen plantear un cambio de asesoría. Hay factores que pueden ser cruciales para decidirnos a hacer el cambio.
Factores para decidir hacer un cambio de asesoría.
- La gestoría no cumple con las expectativas pactadas de inicio.
- Los tiempos de respuesta son excesivamente largos y mi empresa necesita una respuesta más inmediata.
- Mi empresa ha crecido y necesito un despacho que esté a la altura de las nuevas necesidades del negocio actual.
- El precio del servicios se ha incrementado de manera exponencial, incluyendo servicios que no estaban planteados en la propuesta inicial.
- Mi negocio tiene nuevas necesidades y el gestor no me acompaña en este camino.
- Los asesores no son proactivos respecto a nuevas medidas legales, laborales o tributarias, o en la actualización de normas que pueden afectar el negocio.
- No tienen un servicio integral y no generan el valor añadido adecuado a mis necesidades.
- Carencia de compromiso de los profesionales con el modelo de negocio de mi empresa.
- Se han producido errores que a veces derivan en sanciones o pérdidas económicas, como presentar impuestos fuera de plazo, no atender correctamente las notificaciones electrónicas, etc.
Estas situaciones son indicadores evidentes de que se necesita realizar un cambio de asesoría. Errores recurrentes e incluso, discusiones que se repiten periódicamente. Tenemos claro que nuestro gestor tiene que ser nuestro Partner Estratégico y que nosotros tenemos que crecer y evolucionar muy acompañados.
Relación entre asesoría y empresa
Frecuentemente nos sentimos cautivos por la relación estrecha que existe con nuestro gestor y gestoría, a pesar de que nos ha demostrado en más de una ocasión que no ha evolucionado al mismo ritmo que nuestro negocio.
- Se limita a hacer las nóminas y a pedirnos a confeccionar los tributos de forma sistemática.
- No nos informa de los tipos de subvenciones que nuestro negocio podría optar.
- No nos informa de una manera rápida y de forma entendedora de las novedades jurídicas que nos afectan.
- No nos da alternativas y nuevas cláusulas que incorporar a los nuevos contratos de trabajo, que nos permitan actualizarnos constantemente.
Evaluar el trabajo de tu asesoría
Tendemos a evitar los cambios. Por comodidad, nos quedamos quietos, todo y sabiendo que la situación no es buena. O no valoramos los servicios que tenemos y si se adaptan a las necesidades y ofreciendo el máximo de cobertura. Por lo tanto, es importante hacernos algunas preguntas cómo pueden ser estas:
1. ¿Hay una buena comunicación entre empresa y asesoría?
2. ¿Los profesionales tienen los conocimientos adecuados?
3. ¿Cuentan con experiencia en el sector de mi empresa?
4. ¿La asesoría cumple con los plazos establecidos?
5. ¿El asesor de referencia está habitualmente disponible?
Estos son algunos de los factores que te pueden ayudar a plantear un cambio de asesoría. Analiza los puntos y comprueba que tu asesoría cumple las expectativas y los servicios.
Si te has planteado cambiar de asesoría o tienes dudas, contacta con nosotros.
Servicios de asesoría integral a nuestros clientes.