Las fechas de Navidad es habitual compartir un décimo de Lotería de Navidad con miembros de la familia, con amigos o con los compañeros de trabajo. Para la mayoría una tradición navideña más en las fechas previas a los sorteos de lotería.

Una costumbre que puede desencadenar, si el número es premiado, en más de una ocasión en conflictos que han tenido que ser resueltos antes los tribunales.

Para evitar posibles problemas a la hora de compartir un décimo de Lotería de Navidad, hay que tener una serie de consejos básicos, como los publicados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), para evitar conflictos con familiares, amigos o compañeros de trabajo.

Participaciones firmadas

Un décimo es un documento al portador y, en principio, el premio lo recibe quien lo tiene. En el caso de que se comparta, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) explica que es indispensable los siguientes pasos:

• fotocopiar el billete
• entregar a cada participante una copia firmada con el nombre y el DNI del depositario y en el que se indique la cantidad que juega esa persona, así como el número, serie, fracción y sorteo.

Compartir la lotería de Navidad por WhatsApp

Se puede enviar una foto del décimo compartido por email o por WhatsApp, como prueba siempre y cuando aparezcan los datos del depositario, los participantes y la participación de cada uno.

En el caso de ser el décimo compartido comprado online, el comprobante electrónico de los décimos tiene la misma validez legal que el décimo en papel y acredita la propiedad, por lo que solo habría que seguir las operaciones anteriores.

Cuando se va a cobrar un décimo compartido, quien vaya al banco debe identificar a cada ganador y su porcentaje de participación. Una vez hecho esto, las entidades pueden abonar el premio en la cuenta de la persona titular para que luego esta lo reparta según lo convenido.

Según apunta la OCU, no se debe cobrar la totalidad del importe sin identificar antes a los otros participantes, ya que al repartirlo puede parecer que se está donando el dinero, lo que obligaría al pago del impuesto de donaciones.

Hacienda retiene automáticamente el 20% de la parte del premio que exceda del mínimo de 40.000 euros por cada décimo, no por cada persona agraciada. Es decir, se descuenta el impuesto y después se reparte la cantidad neta entre los participantes.

Si el número se comparte con la pareja, la situación varía en función del régimen económico que se tenga. Si es de separación de bienes, el que rige en Cataluña, quiere decir que el premio es de quien ha comprado el número, salvo que se pueda acreditar que se haya comprado a medias.

Si el matrimonio tiene régimen ganancial, el importe se tiene que repartir el 50% para cada cual.

En cualquier caso, el derecho a cobrar los premios caduca a los tres meses contados a partir del día siguiente al de la celebración del sorteo.