¿Estoy cumpliendo con las obligaciones registrales?

En ocasiones se pueden generar dudas entre empresarios y emprendedores sobre las obligaciones registrales. Conocer quiénes están obligados a inscribir sus actos en el Registro Mercantil y las consecuencias de incumplir dichas obligaciones registrales pueden comportar situaciones graves de incumplimiento para la empresa y para sus administradores.  

Para evitar dichos incumplimientos a continuación os detallamos, quién están obligados, las principales obligaciones registrales y las consecuencias de no cumplir con las obligaciones registrales.  

La inscripción en el Registro Mercantil es obligatoria para varias entidades y personas, entre ellas:

• Sociedades mercantiles: Todas las sociedades, ya sean anónimas, limitadas, cooperativas, etc., deben inscribirse.
• Empresarios individuales: Aquellos que ejercen actividades mercantiles a título personal deben registrarse si superan ciertos umbrales de ingresos o si optan por hacerlo para obtener ciertos beneficios.
• Sucursales de empresas extranjeras: Las sucursales que operan en el país deben inscribirse en el Registro Mercantil.
• Otros actos: Algunos actos jurídicos, como modificaciones estatutarias, fusiones o disoluciones, también deben inscribirse para tener efectos frente a terceros.

La inscripción en el Registro Mercantil, es fundamental para otorgar personalidad jurídica y proteger a los terceros que contratan con estas entidades.

Las obligaciones registrales son los deberes que tienen las personas y entidades de inscribirse y mantener actualizada su información en el Registro Mercantil. Estas obligaciones incluyen:

• Inscripción inicial. Registrar la constitución de la empresa o entidad, lo que otorga personalidad jurídica.
• Actualización de datos. Informar sobre cambios relevantes, como modificaciones en los estatutos, cambios de dirección, nombramiento de administradores, y otras alteraciones en la estructura o funcionamiento.
• Presentación de cuentas. Las sociedades suelen estar obligadas a presentar sus cuentas anuales y otros informes financieros.
• Actos específicos. Inscribir actos como fusiones, escisiones, disoluciones y liquidaciones de la empresa.
• Comunicación de disoluciones. Notificar la disolución y el estado de liquidación de la entidad.

Cumplir con estas obligaciones registrales es crucial para la transparencia, la seguridad jurídica y la protección de los derechos de terceros que interactúan con la empresa.

El incumplimiento de las obligaciones registrales, puede tener diversas consecuencias, como son:

• Sanciones administrativas. Estas sanciones se recogen en la Ley de Procedimiento Administrativo con multas que van desde los 300 a los 3.000 euros. Además, el incumplimiento del depósito de las cuentas anuales tiene sanciones más graves que detallamos más adelante. 
• Responsabilidad de los administradores. Los administradores de una sociedad pueden ser responsables personalmente de las deudas sociales si no han cumplido con sus obligaciones registrales.
• Dificultades para obtener financiación. Los bancos y otras entidades financieras suelen exigir a las empresas que estén al corriente de sus obligaciones registrales antes de conceder un préstamo.
• Pérdida de reputación. El incumplimiento de las obligaciones registrales puede dañar la imagen de una empresa y dificultar la relación con clientes y proveedores.

Cumplir con las obligaciones registrales es importante para evitar sanciones, responsabilidades personales y generar problemas financieros en las empresas. Es por ello, que registrar todos los actos de la empresa en el Registro Mercantil y mantener actualizada la información, protege a la empresa y a sus administradores, así como muestra la transparencia de la empresa y la confianza hacia terceros. 

En Lladó Grup Consultor disponemos de un equipo de asesores legales para gestionar y resolver todas tus dudas sobre tus obligaciones registrales.